"Dormiría poco, soñar más." Gabriel García Márquez - de las más valiosas en la vida
Inspiración / / December 26, 2019
Escritor Gabriel García Márquez estaba enfermo de cáncer. Detectar la proximidad de la muerte, escribió una carta de despedida. En que Márquez habla de lo que no tienen tiempo y que fue muy valioso en su vida. Leer, porque este hombre tiene mucho que aprender.
Gabriel García Márquez
El escritor colombiano y novelista, periodista, editor y activista político. El autor de la famosa novela "Cien años de soledad".
Si por un instante Dios se olvidó de que soy una marioneta de trapo y me dio un poco de vida, posiblemente no diría todo lo que pienso; Me habría pensado más en lo que digo.
Daría valor a las cosas, no por su valor, sino por su significado.
Dormiría poco, soñar más, sabiendo que cada minuto con los ojos cerrados -, perdemos sesenta segundos de luz.
Andaría cuando los demás se detienen el, me despertaría cuando los demás duermen, Escucharía cuando los demás hablan.
Y cómo disfrutaría de una crema de buen chocolate hielo!
Si Dios me dio un poco de vida, vestiría sencillo, hasta el primer rayo de sol, dejando descubierto no sólo el cuerpo sino también el alma.
Dios mío, si yo hubiera tenido un poco más de tiempo, escribiría mi odio sobre el hielo y esperar a que el sol sale. Yo pinto sobre las estrellas como Van Gogh, soñando, leyendo poemas de Benedetti, y una canción Serra seria la serenata a la luna. Me regar las rosas con mis lágrimas, para sentir el dolor de sus espinas, y el encarnado beso de sus pétalos.
Dios mío, si yo tuviera un poco de la vida... Yo no habría perdido el día para hablar con la gente que quiero que los amo.
Me gustaría convencer a cada mujer u hombre que los amo, viviría enamorado del amor.
Me gustaría demostrar que la gente lo equivocados que están, pensando que a medida que la edad, el amor ya, por el contrario, que envejecen porque dejan de enamorarse!
Niño le daría alas, y le enseñaría a volar.
El viejo me enseñaría que la muerte no llega con la edad, sino con el olvido.
He aprendido mucho de ustedes los hombres.
He aprendido que todo el mundo quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber que la verdadera felicidad aguarda a él en el descenso.
Me di cuenta de que cuando un recién nacido aprieta primero el dedo de su padre con su pequeño puño, lo tiene atrapado por siempre.
Me di cuenta de que la persona tiene derecho a mirar a otro hacia abajo con el fin de ayudarlo a ponerse de pie.
He aprendido mucho de usted, pero la verdad es que la mayor parte de ella se beneficiarán, ya que metió el tronco, me voy.